FILADELFIA (AP) — Teoscar Hernández remontó a los Dodgers con un jonrón de tres carreras en el séptimo inning que rescató a Shohei Ohtani —tanto en la lomita como con el bate— y guió a Los Ángeles a una victoria 5-3 sobre los Filis de Filadelfia en el Juego 1 de su Serie Divisional de la Liga Nacional la noche del sábado.
Ohtani se ponchó cuatro veces seguidas al bate, la última en el séptimo con dos corredores a bordo y sin outs frente a Matt Strahm.
No hubo de qué preocuparse, al menos para los vigentes campeones de la Serie Mundial.
Tras un elevado de Mookie Betts, Hernández silenció a una estruendosa multitud con un batazo a la banda contraria por el jardín derecho ante Strahm para voltear el marcador 5-3. El slugger veterano celebró efusivamente mientras rodeaba las bases.
Con la gorra en la mano, Ohtani se levantó del dugout para unirse a la celebración y respiró aliviado al encaminarse al triunfo.
Triple Jugador Más Valioso, Ohtani se repuso de un racimo de tres en el segundo episodio en su primera apertura como lanzador en postemporada para luego maniatar a los Filis y terminar con nueve ponches en seis entradas.
Alex Vesia retiró al emergente Edmundo Sosa con las bases llenas en el octavo para preservar la ventaja. Roki Sasaki trabajó el noveno para su primer salvamento en postemporada.
Ohtani había admitido nervios por jugar ante una afición que intentó estar a la altura de su apodo de “cuatro horas de infierno”: lo abuchearon incluso durante los calentamientos, y nunca encontró el ritmo con el madero.
Ohtani recibió boleto en el noveno.
El abridor de los Filis, Cristopher Sánchez, ponchó a Ohtani tres veces, incluida una tercera por strike cantado en el quinto inning que desató el delirio del público agitando toallas.
Sánchez también se encendió con ese ponche y alzó el puño al salir del montículo.
El 0-4 de Ohtani con el bate quedó como una mera nota al pie —aunque es el primer jugador en poncharse cuatro veces como bateador y abanicar a nueve rivales como lanzador en un mismo juego de postemporada— dentro de una vibrante remontada de unos Dodgers que venían de barrer a los Rojos en la Serie del Comodín.