La esperada película “Soy Frankelda”, el primer largometraje mexicano realizado completamente con la técnica de stop motion, llegará a los cines del país el próximo 23 de octubre, marcando un hito en la historia de la animación nacional.
Un proyecto de 14 años y una historia fantástica
Dirigida por los hermanos Arturo y Roy Ambriz, la cinta es una producción del estudio Cinema Fantasma, reconocido por su trabajo artesanal y su estética gótica inspirada en el folclore mexicano. La trama sigue a Frankelda, una joven del siglo XIX que sueña con convertirse en escritora y da vida, a través de su imaginación, a criaturas fantásticas nacidas de sus miedos y deseos.
- Tras un evento traumático, la protagonista viaja a su subconsciente, donde se enfrenta a sus propias creaciones en un universo que desafía la línea entre la realidad y la ficción.
Creatividad ante la falta de recursos
A diferencia de estudios internacionales como Aardman (Wallace y Gromit) o Laika (Kubo y las dos cuerdas mágicas), que manejan presupuestos cercanos a los 100 millones de dólares, los realizadores mexicanos trabajaron con recursos limitados, apostando por la innovación y la autogestión.
Los Ambriz fabricaron manualmente los moldes de sus marionetas —incluyendo seis versiones diferentes de Frankelda— y utilizaron más de 700 pinturas al óleo para crear los fondos y transiciones visuales del filme. “Nos decían que solo podíamos hacer eso en Inglaterra o Polonia, pero demostramos que México puede lograrlo”, afirmaron los directores.
Un orgullo para el cine mexicano
“Soy Frankelda” ha sido seleccionada en múltiples festivales internacionales de animación, convirtiéndose en la producción mexicana más reconocida de su tipo. Los directores aseguran que la película “representa bien a México”, no solo por su estética y narrativa, sino por su espíritu creativo y resiliente.
- El estreno promete consolidar a Cinema Fantasma como un referente del cine animado latinoamericano y abrir camino a una nueva generación de artistas del stop motion.
